Gobernador asegura que no cercarán Santa Cruz por caprichos políticos, y llama a estar atentos a la defensa

El Gobernador de Santa Cruz Luis Fernando Camacho se pronunció con respecto al bloqueo en el municipio de Cuatro Cañadas, reiterando que esas demandas son netamente políticas y que solo buscan cercar Santa Cruz y dañar el aparato productivo.

En ese sentido llamó al pueblo cruceño a estar atento para defender esta tierra.

Recordó que invitaron al diálogo al alcalde de dicho municipio para sentarse en las mesas técnicas y ver las respectivas posiciones de acuerdo a sus competencias y llegar a una solución.

Sin embargo, lamentó que hayan abandonado la reunión, lo que demostró que sus demandas son netamente políticas y que la decisión de bloquear se tomó en un ampliado del MAS.

Camacho insistió en que las puertas de la Gobernación siempre están abiertas para el trabajo de sus demandas con los técnicos especializados en cada área, dentro de sus pliegos petitorios para tratar las responsabilidades y recursos de los niveles de gobierno.

«Ellos automáticamente quieren sí o sí con el gobernador. Eso es una falta de voluntad», reclamó, al dejar en claro que solamente buscan pedidos irracionales, como el desayuno escolar, que es competencia de los municipios, y los ítems de salud, que les corresponden al Gobierno nacional.

Acotó que dicha intransigencia viene orquestada a través de los operadores políticos Evo Morales, Mario Cronembold y Adriana Salvatierra, que buscan dañar la economía y el desarrollo de Santa Cruz.

En este sentido, acotó que esta decisión tiene como fin el cercar al departamento, ya que el libreto del bloqueo en Cuatro Cañadas es el mismo que el de San Julián.

Ante ello, la primera autoridad del departamento aseguró que no tomarán Santa Cruz y llamó a los ciudadanos a estar atentos a defender a esta tierra y el aparato productivo, ya que cada día de bloqueo perjudica a los sectores productivos, exportadores, comerciantes y a las familias en general, afectando a otros departamentos del país, como Beni por no poder transportar la carne.

Reclamó que no existe un pedido sólido para sentarse a discutir entre ambas partes y llegar a una solución. «Yo no puedo dejar de lado la agenda normal que tiene la Gobernación por escuchar caprichos que no tienen una fundamentación real en la que se le pueda dar soluciones.

Los convocamos, vinieron y se fueron (…) ¡uno se sienta con quien sea para solucionar, pero no hay esa voluntad!», afirmó, y luego insistió en que el ente departamental no se prestará al juego de ese capricho político.

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