En su día, el jugador de la selección boliviana decidió llevar la camiseta 18, el número con el que su padre William Ramallo fue máximo anotador en las eliminatorias de 1993, cuando la Verde se clasificó al Mundial de Estados Unidos 94.
En una jornada especial para él, el día de su cumpleaños 31 (14 de octubre de 1990), Rodrigo Ramallo anotó un golazo a los 21 minutos con el que Bolivia abrió la goleada sobre Paraguay (4-0) en el estadio Hernando Siles de La Paz, por la jornada 12 de las eliminatorias para el Mundial de Catar 2022.
Activo por la banda derecha, por donde se proyectó mucho, en la jugada que derivó en el único tanto del primer tiempo Ramallo más bien apareció por el medio, recibió un pase de Marcelo Martins, picó la pelota con maestría para sacarse de encima a un rival y, a pesar de que fue jalado de la camiseta, sacó un zurdazo que mandó un misil al ángulo derecho, dejando parado al golero Antony Silva. Un golazo que hizo estallar a las tribunas de Miraflores.
Ramallo festejó primero mostrando el número de su camiseta, el 18, que eligió esta vez en homenaje a su padre William Ramallo, quien con esa divisa fue goleador de América en 1993, cuando Bolivia se clasificó al Mundial de Estados Unidos de 1994.
Después hizo el ademán de un abrazo a sí mismo, como para decirse “Feliz cumpleaños, Rodrigo” y se hincó en el césped casi derramando lágrimas, para luego recibir las felicitaciones de sus compañeros.
The Strongest, Wilstermann y San José fueron los anteriores equipos de Ramallo, quien en la actualidad juega en Always Ready.
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