La historia de doña Luisa Moreno de 92 años y don Freddy Gómez de 80, es muy singular. Vivieron juntos en concubinato durante mucho tiempo, pero en el ocaso de sus vidas decidieron formalizar su unión ante los ojos de Dios en la parroquia Nuestra Señora de las Mercedes en Montero. El acto religioso se realizó el viernes.
Luisa y Freddy, que mantienen intacto el amor como el primer día que se conocieron, se unieron en sagrado matrimonio en una ceremonia sencilla con la presencia de sus hijos, nietos y bisnietos, la boda se desarrolló en un ambiente emotivo cargado de mucha felicidad, la novia lució un vestido blanco con un ramo de flores en la mano mientras que el novio para la ocasión vistió un terno de color plomo.
Según el programa La Otra TV que cubrió la ceremonia, don Freddy cumplió su promesa que hizo dos meses atrás de llevar hasta el altar de la iglesia a su compañera de vida de muchos años. El novio dijo que había visto y escuchado a su difunto padres que le decía que tenía que casarse, por eso decidió formalizar su relación con su cónyuge.
La pareja convive desde hace varias decenas de años y fruto de esa relación han nacido sus hijos que en la actualidad ya son padres de familia y le han dado nietos a doña Luis y don Freddy.
Pese a sus carencias económicas, la pareja lleva una vida digna. Él a sus 80 años todavía tiene la fortaleza suficiente para poder realizar trabajos de jornalero, carpiendo lotes, cuidando propiedades y cargando productos.
De su lado doña Luchita, con 92 años sobre sus espaldas, apoya a la economía del hogar preparando exquisitos platos que le solicitan sus asiduos clientes que conocen de la buena sazón que les pone a sus comidas.
Ambos están muy guapos todavía, gozan de buena salud y tienen bastantes energías, eso explica porque a su edad no paran de trabajar.
*Con datos de Edgar López -La Otra TV
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