La jornada de viernes fue la última de la reciente campaña de médicos especialistas en oftalmología, que al final de su labor recibieron la gratitud de quienes de una u otra manera los apoyaron para llevar adelante la atención de alrededor de 200 pacientes de los cuales 72 fueron sometidos a cirugía: 70 de cataratas y 2 de pterigion.
Desde el pasado domingo y por seis días de intenso trabajo, un grupo de misioneros norteamericanos, entre ellos, especialistas en cirugía de ojos y personal de apoyo, llevaron adelante una campaña que habitualmente realiza el Consejo de Salud Rural Andino, (CSRA) que tiene como su base de operaciones, el Centro de Salud de Villa Cochabamba.
Dr. David Markof, recibe un reconocimiento de manos del director regional del CSRA Dardo Chávez
El grupo de profesionales, estaba encabezado, como todos los años, por el oftalmólogo David Markof, que ha dedicado parte de su vida a servir a la gente con estas campañas que favorecen a personas de escasos recursos económicos, muchos de los cuales, no podrían acceder a este tipo de cirugías por el costo económico.
David Markof, realiza anualmente esta labor desde 1996, cuando todavía joven comenzó a mostrar su carácter altruista y solidario, llegando a Montero con acompañantes que también demuestran su solidaridad y junto a Markof, devuelven la vista de muchas personas que confían en su trabajo. Estas campañas anuales, solamente sufrieron postergación en lo más duro de la pandemia del coronavirus que impidió la llegada de los misioneros.
Este viernes, al finalizar su labor, el grupo de profesionales recibió el reconocimiento del CSRA y de los pacientes que fueron beneficiados con esta campaña. El director del CSRA, Dardo Chavez Soleto, fue el encargado de expresar su satisfacción por los resultados alcanzados y agradeció al grupo de profesionales por su labor.
Jóvenes voluntarios aportaron con su trabajo como traductores
Esta campaña, además del CSRA, que trabaja con su personal de una manera afectuosa, diligente y de mucho cariño y respeto por los pacientes, es apoyada por el club rotario y jóvenes del Rotarct, que aportan con el apoyo logístico durante la permanencia de los misioneros y otro grupo de jóvenes voluntarios que vienen desde Santa Cruz de la Sierra y se desempeñan como traductores, quienes también fueron objeto de reconocimiento.
En el acto estuvieron presentes,representantes de las instituciones que tienen relaciones de trabajo con el CSRA, como el Rotary Club Montero, Damas de la Cruz Roja, Salud Comunitaria y la ONG Incade, que llevan adelante programas de labor comunitaria, llegando a miles de personas, que se benefician con la prestación de sus servicios.
Representantes de instituciones de apoyo con el CSRA, presentes en el acto
Labor silenciosa
El CSRA, que trabaja en Montero desde la década de los años 90, desarrolla una serie de programas relacionados con la salud y la asistencia de carácter social a sectores vulnerables de la sociedad. Su amplio relacionamiento con personas de corazón abierto en EEUU, miembros de la iglesia Metodista y a la vez en gran mayoría rotarios, le permiten llevar adelante campañas de apoyo que han logrado resultados muy positivos y beneficiosos.
Estos misioneros llegan y trabajan, inclusive como constructores, y aportaron, por ejemplo, en la construcción de viviendas en una comunidad guaraní, en cercanías de Warnes, gran parte de la construcción del centro de salud de la Cruz Roja, fue posible gracias a este trabajo.
Otra de las actividades de asistencia en salud, es el programa que lleva adelante con la fundación Rosa Vera, cuya misión es la atención de niños con parálisis cerebral, captados en nuestro medio y atendidos amorosamente con personal capacitado y con administración de medicamentos y apoyo a sus familias.
Es una labor silenciosa que merece el reconocimiento de nuestra sociedad y sus autoridades, porque tiene como base la solidaridad, aspecto que fue relievado por el doctor Dardo Chávez, cuando expresaba que viendo cómo trabajan estos misioneros voluntarios podemos concluir, que es fácil ser solidarios, si existe la voluntad para serlo.
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