El Departamento de Defensa del Consumidor y la Unidad de Salud Pública del Gobierno Autónomo Municipal de Montero llevaron a cabo una demostración para evidenciar la potencia y peligrosidad de los fuegos artificiales.
La manipulación de estos artefactos, especialmente si no se realiza con las debidas precauciones, puede ocasionar daños severos e irreversibles, particularmente en los niños, advirtió Oliver Ortiz, responsable de Defensa al Consumidor.
El principal objetivo de esta iniciativa es concienciar tanto a los comerciantes que venden estos productos como a los padres de familia, quienes suelen proporcionar dinero a los menores para adquirirlos. Los fuegos artificiales tienen una alta demanda y son especialmente populares durante las celebraciones de Navidad y Año Nuevo.
“Lo que buscamos es proteger la integridad física y la salud de la población”, afirmó Mario Fernando Pizarro, responsable de la Unidad de Salud Pública.