Blooming era el favorito para llevarse la victoria frente al recientemente ascendido al fútbol profesional Independiente Petrolero que se estrenaba en estas lides. Sin embargo la academia cruceña no pudo superarlo y cedió un empate de local 2-2.
Después de 17 años los hinchas del fútbol de la capital del país volvieron a tener un equipo en el fútbol profesional representándolos. Y lo hizo bien porque pese a estar abajo en el marcador nunca bajó los brazos y en el segundo tiempo mejoró su producción que le permitió llevarse un meritorio empate a casa.
Blooming apretó el acelerador desde el inicio, gestando ataque por ambas bandas aprovechando la velocidad de sus delanteros. Precisamente la jugada del primer gol nace en los pies de Hugo Rojas que recibe un pase desde la izquierda, hace un enganche interno y elude a su rival para ceder el balón a su compañero que estaba mejor ubicado Rafael Baros que facturó a los 9 minutos.
El volumen futbolístico de la visita fue creciendo poco a poco por el partido, Blooming no pudo pararse bien en el campo de juego y cedió espacios necesarios para que los capitalinos se asomen al arco de Peñarrieta, que al minuto 37 no pudo atrapar el balón que Mijail Avilés mandó al fondo del arco después de cobrar un tiro libre.
La academia explotó muy bien las bandas. El flanco izquierdo fue el lado más débil de Independiente, por esa zona Rafael Barros ancara y mete un centro retrasado para Junior Sánchez que empalma de primer para colocar el marcador 2-1 a favor de los cruceños, así se fueron al descanso.
En el complemento, pese a estar abajo en el marcador el cuadro capitalino no bajó los brazos, bregó y gestó jugadas interesantes triangulando muy bien, tuvo oportunidades aumentar pero sus delanteros no estuvieron finos al momento de definir.
El que si definió fue José Correa, faltando seis minutos para el final tras un centro de Suárez punteó el balón para desubicar a Peñarrieta y llevarse un punto valioso a la capital.
*Crédito de foto: Opinión
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