Autor: José Mercado Ortiz
No es necesario nacer en Montero para ser un montereño más, trabajar y solucionar gran parte de sus necesidades. Seguro ese fue el pensamiento del sacerdote Salesiano Mario Pani Mulas, llegó a estas tierras y se enamoró. Comenzó su apostolado y realizó varias obras que son testimonio del cariño y respeto por sus habitantes.
Los habitantes de esta ciudad, son testigos de la gran labor del sacerdote italiano y ponderan con cariño su gran obra, especialmente en el barrio La Floresta, donde construyó la Parroquia San José, y otras obras que los vecinos agradecen por su importancia.
Mario Pani Mulas SDB nació en la parte continental de Italia en una Isla de Cerdeña, estudió primaria en Tortali a orillas del mar Mediterráneo, estudió en el Colegio Salesiano de Parma «San Benedetto». En 1937 ingreso al Instituto Salesiano de Lanusei. En 1942 hizo el noviciado en Roma y su Tirosinio en Cerdeña en 1948.
Recibe instrucciones de la oficina Misionera Salesiana de Turin y sale a la Inspectoría de Perú a inicios de 1949 y después al Colegio Don Bosco de La Paz en 1971.
Llegó a Muyurina-Montero como profesor de inglés y matemáticas y colaboró con las Hijas de María Auxiliadora y volcó su trabajo por el barrio La Floresta.
Entre sus obras más sobresalientes, creó la Cooperativa de Vivienda La Floresta, Kínder María Mazzarello, Básico Parroquial María Mazzarello, Radio María Auxiliadora, Comedores de Niños Etta Turner y Madre Teresa de Calcuta. Nació el 26 de octubre de 1926 y falleció el 11 de Julio de 2020.
Pueblo y autoridades reconocen su apostolado y beneficio a la comunidad y determinaron honrar su memoria, colocando una estatua confeccionada por el escultor montereño Pablo Enrique Paz y será inaugurada en el frontis de la Iglesia del barrio La Floresta el venidero 24 de septiembre.
Por: José Mercado Ortiz
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