Un grupo de médicos voluntarios procedentes de Estados Unidos conformado actualmente por cuatro familias que realizan una labor solidaria en barrios de Montero desde 2005 recibieron un cálido recibimiento y merecido reconocimiento de parte del Concejo Municipal de Montero en acto realizado la mañana de este jueves en sesión ordinaria del cuerpo deliberante.
Además del reconocimiento, el presidente del Concejo Municipal Wilan Perales, manifestó la necesidad y la obligación de las autoridades locales a prestar el mayor apoyo a esta labor y a las gestiones que realicen en futuras visitas a Montero.
Perales reconoció que la labor de este grupo de voluntarios es loable porque llegan trayendo equipos, medicamentos y capacitación para profesionales en los avances de la ciencia médica.
Después de haber cumplido su labor a lo largo de una semana, el grupo de voluntarios se ausentará a su país el próximo domingo, luego de cumplir algunas actividades más en otros centros de salud, como es la entrega de kits o juegos de objetos útiles para recién nacidos en las maternidades Divino Niño, Juana Azurduy y Che Guevara destinado a madres que próximamente van a tener sus bebés.
Durante su estadía estuvieron realizando su labor en el Centro de Salud Ernesto Ché Guevara del Distrito 3 u en el barrio Villa Esterita de la parte norte del municipio de Montero.
El director del grupo Michael Wilson, llegó por primera vez a Montero en 2005 junto a David Barney y el grupo de profesionales y voluntarios se ha incrementado a través de actividades realizadas en su país donde logran además de la adhesión de más voluntarios, equipos y recursos económicos a ser utilizados y donados al sistema de salud de Montero, según expresiones de la concejal Pilar Villarroel.
Villarroel, muy ligada a labor en el sistema de salud, como concejal, agradeció la labor de estos voluntarios, que además de lo expresado también dejan enseñanzas a través de capacitación al personal en diversas especialidades, como es el caso de la atención en emergencias o a las enfermeras en el manejo de neonatos, en alimentación saludable, información y entrega de kits de higiene a adolescentes que ingresan en la etapa de su primera menstruación, tema en el que sugieren exista más apoyo del personal local.
Algo destacable, es que este grupo, además de prestar servicios en salud, también se dedican a la construcción de aulas, baños y sistemas de agua en unidades educativas donde hacen falta.
Un ejemplo de esta labor, es la construcción de la primera aula en el barrio Nuevo Amanecer, que con el paso del tiempo se convirtió en la Unidad Educativa Juancito Pinto.
La última vez que este grupo llegó a Montero fue en 2019. La pandemia del coronavirus frenó la continuidad de su labor, que fue nuevamente emprendida en este 2024.

