Este 4 de julio, Tarija conmemora 451 años de fundación, historia y empuje

Autoridades de Tarija rinden homenaje a los 451 años de fundación de la capital chapaca

Tarija conmemora hoy 451 años de fundación. 451 años desde que el capitán español andaluz, Luis de Fuentes y Vargas, fundó la Villa de San Bernardo de la Frontera de Tarixa, hoy conocida como la provincia Cercado, la capital chapaca, la capital de la sonrisa.

Según el historiador boliviano, Adolfo Alzugaray, los primeros pobladores del valle de Tarija fueron las tribus churumatas y los tomatas. Los primeros fueron dispersos por los incas encabezado por el emperador del Perú Huayna Kapac, que pisaron el valle de Tarija antes de la colonización por los españoles, y los segundos reducidos a la parcialidad de los chichas.

Las primeras expediciones coloniales a Tarija se registran a partir de 1538 y 1549 con Pedro de Candia y Diego de Rojas, sin embargo, estas entradas no fueron consideradas como conquista y fundación. El año 1548 señala la presencia en el valle de Tarija de Juan Ortiz de Zarate y el desarrollo de la actividad agrícola y ganadera.

Fue Francisco Álvarez de Toledo, Virrey del Perú, quien ordenó la fundación de la Villa de San Bernardo de la Frontera de Tarixa, actual ciudad de Tarija. Le otorgó ese título y facultad al capitán Luis de Fuentes y Vargas, quien, junto a los habitantes chichas radicados en el valle, más 140 hombres que lo acompañaron, fundó la nueva población en la rivera izquierda del río Nuevo Guadalquivir. Fue el 4 de julio de 1574.

El nombre de Tarija proviene de la similitud que una expedición española halló en el actual Valle de Rosillas. Donde encontraron algo parecido a las torretas del valle español de Torija (municipio español ubicado en un estrecho y estratégico valle en la provincia de Guadalajara, Castilla-La Mancha). Tarija era una palabra árabe andaluz que significa torreta.

Luis de Fuentes y Vargas tenía la autoridad para cumplir sus obligaciones como Capitán y Justicia Mayor, a partir de la notificación que decía de manera original: “por la presente os doy comisión para que podáis dar y repartir tierras, solares y chácaras, huertas estancias, y otros”.

Para dar principio a lo que por convicción de Dios tomó a su cuidado y cargo, hizo demostración de una imagen de San Bernardo, que evocó como su protector, patrón y abogado e hizo solemne juramento de cumplir con todo su asiento y capitulación.

Sus principales misiones religiosas fueron creadas para contener el ataque de las tribus belicosas de los chiriguanos que habitaban los márgenes de los ríos Parapetí, Guapáy, Pilcomayo, Bermejo y otros.

El primer terrateniente

Todos los que acompañaron en la fundación de la Villa de San Bernardo de Tarija a Luis de Fuentes y Vargas, dos años y seis meses más tarde, en 1576, recibieron los primeros beneficios en el reparto de tierras.

Entre estos se destaca Gutiérrez Velásquez de Ovando, que poseía terrenos en Escayache, Canasmoro, Tarija la Vieja (San Lorenzo), Loma de San Juan, Erquiz, Tolomosa, La Angostura y cerca del Valle de Concepción, recibió este beneficio del primer alcalde ordinario Antonio Domínguez.

El segundo alcalde ordinario le entregó dos solares que colindaban con el Convento del nombre de Jesús de la Orden de Santo Domingo (actual manzano del Colegio San Luis), y con Juan de Robles y Juan Pizarro; además de dos solares para las hijas de este.

El obsequio más antiguo otorgada a Gutiérrez Velázquez de Ovando data del 4 de agosto de 1574, fue el hombre más rico de la Villa de Tarija.

La caída de un conquistador

Luis de Fuentes gobernó Tarija como Corregidor, Capitán y Justicia Mayor, pero fue destituido en 1586. Para defenderse se trasladó a la Ciudad de La Plata.

Al sentirse morir, redactó su testamento el 10 de agosto 1598. En este documento fija el lugar de su entierro, dispone misas y capellanías, establece la fundación de una memoria en la Villa de San Bernardo de Tarija, varias donaciones, declara tener una deuda en la tienda de Don Juan Porcel y Padilla de dinero y otras cosas que de allí ha sacado.

Además, establece como sus bienes: a) Objetos de plata, barras de hierro, un arcabuz, una casa y otras cosas más que pide pongan en inventario, b) una viña en la otra banda del río Guadalquivir, con veinte mil cepas  aproximadamente c) la cuarta parte de tierra que tiene en el valle de Tarija recibidas del Rey como Fundador y poblador de la villa, d) una estancia en la puna de Escayache, e) labranzas en sus tierras de Tarija la vieja con diez y ocho pares de bueyes, rejas y otros aperones de labranzas, f) el derecho sobre sus anacoras, g) cuatro mil ovejas, cuatrocientos cabezas de puercos y cuatrocientas cabezas vacunas.

Luis de Fuentes y Vargas murió el 14 de agosto de 1598 pobre, enfermo y en la absoluta soledad en la Ciudad de la Plata, Capital de la Audiencia de Charcas, sin dejar descendencia por no haber contraído nupcias. Nombró como heredero de todos sus bienes a Juan Porcel de Padilla, nacido en Granada (España), radicado en la Ciudad de la Plata (Sucre) Provincia de Charcas.

*Fuente: El País